LASAÑA BOLOÑESA

Hoy toca pasta. La comida más socorrida y buena, sea el tipo de pasta que sea y la combines con lo que la combines. Es la "comida comodín" como yo la llamo. Cualquier resto de comida que tengas en la nevera tiene solución combinándolo con la pasta o el arroz (el otro comodín). La receta que os traigo hoy es una lasaña boloñesa, un plato clásico. Cuando se trata de canelones siempre me gusta variar más el relleno o buscar combinaciones de sabores sorprendentes, pero en el caso de la lasaña soy muy clásica, no suelo salir de la boloñesa entre otras cosas porque a los niños les encanta!! y me tienen prohibido hacerla de otra manera... Las cantidades son para una fuente de las grandes, como unas 6 personas porque en casa vuela. Si fuera para menos sólo tenéis que reducir las cantidades. Os dejo con la receta...

500 gr de carne picada
Placas de lasaña
1 cebolla mediana
3 zanahorias
1/2 vaso de vino blanco
1 vaso de caldo de pollo o carne
1 kg de tomates maduros
1/2 l de leche
2 cucharadas de harina
3 cucharadas de mantequilla
Orégano
Albahaca
Nuez moscada
Sal
Una pizca de bicarbonato
Aceite de oliva

1. Cocemos las placas de lasaña en agua y sal con un chorrito de aceite en el tiempo que indique y reservamos.

2. Preparamos la boloñesa. Rehogamos en una cacerola la cebolla picada y cuando esté pochada, añadimos la zanahoria cortada en rodajas no muy gruesas. A continuación, incorporamos la carne picada (podéis poner la que más os guste, pavo, cerdo o ternera según el gusto) de cada uno. 

3. Salteamos junto a las verduras. Cuando la carne cambie de color, le añadimos el medio vaso de vino, aromatizamos con un poco de orégano y albahaca, sazonamos y dejamos guisar unos minutos para evaporar el alcohol.

4. A continuación, vertemos el caldo de pollo o carne y dejamos cocer hasta que la carne y las verduras estén tiernas. Cuando haya perdido todo el líquido en la cocción, añadimos los tomates triturados y dejamos que se guise junto a la carne para que vaya perdiendo todo el agua. Añadimos una pizca de bicarbonato o si preferís, media cucharadita de azúcar para que los tomates pierdan la acidez. Dejamos que la salsa espese y reservamos.

5. Mientras tanto, vamos a hacer la salsa bechamel. Calentamos la mantequilla y cuando esté derretida sin llegar a hervir, añadimos la harina que rehogaremos para que pierda el sabor a cruda. Iremos añadiendo leche poco a poco para que vaya espesando. Le espolvorearemos sal y un poco de nuez moscada.  Reservamos.

6. Montamos la lasaña. Ponemos una primera capa de bechamel, capa de placas de pasta, encima una capa de carne y así varias hasta la altura que le queramos dar a la lasaña. Cubrimos con la salsa bechamel. Espolvoreamos con queso rallado para gratinar y horneamos unos 20 minutos a 180º. 
En los últimos 5 minutos gratinamos. 


Comentarios